Lapis Este se está convirtiendo rápidamente en una ciudad en ruinas... El hambre y la sequía nos asolan. Por suerte, el tío Dreadbane, como lo llama Sadie, nos ha acogido por el momento... aunque esta bendición podría ser una maldición disfrazada. Lleva ese martillo adondequiera que va, encorvado por el peso. Siempre lo escucho por los pasillos, arrastrándolo, resoplando. "Es para protegerme", dice. "Se arrastran en las profundidades. Los escucho. Desde el núcleo hueco...". Es francamente espeluznante. ¡Necesitamos esperanza, no historias de terror! Fue a buscar agua al pozo cercano, pero han pasado horas y me preocupa. Iría a buscarlo, pero creo... Odio admitirlo, pero creo que yo también oigo a las criaturas que reptan abajo.

Encontraron el potente martillo Dreadbane, corrompido por el Velo, en el fondo de un pozo infestado de bichos.